En el caso de la liquidación de bienes de la persona, se trata de “un procedimiento judicial para vender rápida y ordenadamente los bienes del deudor para pagar sus deudas”, explica la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento.
En el proceso judicial de la reorganización de empresa deudora, ésta propone a sus acreedores un acuerdo, que establece una nueva forma de pago de sus deudas y le permite seguir funcionando.
Para la liquidación de empresas, el procedimiento judicial “permite el cierre formal mediante la venta de los bienes de la empresa para el pago de la deuda a sus acreedores”.
Berta Castro, fundadora de IRC Abogados, estudio especializado en la nueva Ley, explica : “La Ley de Quiebras permite volver a empezar, a saldo cero, es decir, libre de deudas en un período corto de tiempo, sin DICOM y sin información en Boletines Comerciales”